Cualquier persona que presenta en la boca lesiones que no se curan, y a veces otros síntomas como sangrado, dolor de oídos, incomodidad o adormecimiento de la lengua, la boca o los labios, pueden someterse a este procedimiento.

Se realizará un diagnóstico extenso que suele incluir estudios radiológicos, y se valuará el estado de salud.
Se informará así de las mejores opciones adaptadas a cada paciente, pues en el caso de tumores malignos la detección precoz es fundamental, ya que puede tratarse con un mayor éxito mediante cirugía o radioterapia.

Los pequeños tumores, biopsias, toma de muestras y extirpación de lesiones benignas (de riesgo bajo) pueden realizarse en clínica.
Por el contrario las lesiones grandes, los tumores malignos, extensos o graves, son tratados en hospital.
El centro ofrece la coordinación de su equipo multidisciplinar, que se encargará de obtener los mejores resultados a la hora de eliminar la lesión y de devolver a la zona afectada al mejor estado posible.

Depende del tipo de tumoración, aquellas lesiones que precisan un tratamiento mínimamente invasivo tendrán un postoperatorio reducido y muy cómodo.
En los grandes tumores, o en los tumores malignos, el ingreso puede prolongarse unos días.

Cuando es realizada por un equipo multidisciplinar bien coordinado, las complicaciones son poco frecuentes.
No obstante, pueden darse complicaciones, como infección, sangrado, asimetrías, alteraciones en la cicatriz o reacciones a la anestesia y a la radioterapia de ser necesaria.
Se pueden minimizar los riesgos siguiendo de manera cuidadosa las instrucciones entregadas al paciente.

Habitualmente los resultados dependen de la gravedad del tumor.
Como en todas nuestras actuaciones nuestro objetivo es buscar el mejor resultado, con la menor agresividad y ofreciendo todas las posibilidades terapéuticas conjuntas para lograr la excelencia en los resultados que es siempre nuestro objetivo.