Cualquier persona sana, con dolor y adormecimiento en los tres primeros dedos y parte del anular de la mano, causada por la compresión del nervio en la muñeca, puede someterse a este procedimiento.
Para ello es obligatorio confirmar el diagnóstico mediante estudios electrofisiológicos (que miden la respuesta de los músculos y la función de los nervios).

Se realizará un diagnóstico del grado de la afectación y del estado de salud. Además, se valorarán los estudios electrofisiológicos (que miden la respuesta de los músculos y la función de los nervios).
Tras esto, se informará de las mejores opciones, adaptadas a cada caso. Se entregarán las instrucciones preoperatorias adecuadas.
Es precisa la compañía de algún familiar o acompañante que pueda llevarle a casa cuando se le dé el alta (sí es preciso el centro puede ofrecerle ayuda para resolver esa dificultad) y que, en caso necesario, puedan ayudarle un par de días.

La intervención se realiza en quirófano, usando anestesia local. La infiltración puede realizarse en la clínica.
La operación suele durar unos 30 minutos, y en ella se libera el nervio comprimido.
Al terminar la cirugía, se efectúa una cura, se coloca un vendaje y un cabestrillo.

Durante las primeras 24 horas puede haber incomodidad, que cede fácilmente con medicación.
Después de una o dos semanas, se leretirará el vendaje, la férula si fue necesaria, y los puntos si se realizó la cirugía.
La actividad laboral puede retomarse tras uno ó dos meses; sin embargo, no se deberán realizar algunas actividades hasta que no pasen algunas semanas.
Se realizará un seguimiento personalizado durante los meses siguientes a la cirugía para ver la evolución.

Cuando es realizada por un cirujano plástico cualificado las complicaciones son infrecuentes y de poca importancia.
No obstante, siempre existe el riesgo de complicaciones, como infección, sangrado, adormecimiento de algún dedo persistente o reacciones a la anestesia.
Se pueden minimizar los riesgos siguiendo de manera cuidadosa las instrucciones, tanto antes como después de la cierugía.

Suelen ser muy favorables. Una vez haya pasado la fase inicial de recuperación, un programa de rehabilitación y el seguimiento ayudarán a obtener el mejor resultado posible.