Cualquier persona sin alergias a los productos utilizados y que comprende los resultados que se pueden obtener, puede someterse a este tratamiento con el objetivo de mejorar la tensión de la piel.

En la primera consulta se evaluarán los puntos clave, como actuar y hasta donde llegar para obtener un buen resultado. Se explicarán las distintas posibilidades y se indicarán los cuidados posteriores.
Es necesario indicar el consumo de alguna medicación o si padece alguna alergia.

Una vez decididas las correcciones a realizar, se realizarán pequeñas inyecciones para administrar el tratamiento. De esta forma aplicamos el producto con seguridad y eficacia.
El procedimiento se realiza entre 15 y 30 minutos.

Se entregarán instrucciones y una cita de revisión para poder obtener la máxima efectividad y el resultado más satisfactorio posible.

Es una técnica muy segura con mínimas complicaciones como algún hematoma (moratón) ocasionalmente e hinchazón temporal. El seguimiento tras la técnica nos permitirá hacer un adecuado control de los resultados y resolver cualquier problema que pudiera surgir.
En la Clínica Valero, empleamos rellenos de la máxima calidad para mayor seguridad y duración.

Los resultados suelen ser muy gratos para el paciente.