Cirugía proctológica

Incluye un grupo de técnicas indicadas para tratar lesiones y enfermedades del canal anal, como las hemorroides, la fístula, la fisura y, fuera del ano, el quiste sacro.

Resumen
18-80 años
1h de cirugía
Anestesia epidural
1 día de hospitalización
2-4 semanas de recuperación
El proceso
Cualquier paciente con patología en el área del recto que no responde al tratamiento médico, o su caso se encuentra cronificado o avanzado.
En el caso del quiste sacro siempre se recomienda la extirpación.
En la consulta inicial evaluaremos el estado de salud y explicaremos la técnica quirúrgica más apropiada. Es preciso que se indique el consumo de tabaco o de alguna medicación o vitamina. Así, se entregarán las instrucciones preoperatorias adecuadas.
Asegúrese, además, de que algún familiar o acompañante pueda llevarle a casa cuando se le dé el alta (o solicítenos que le resolvamos esa dificultad) y que, en caso necesario, puedan ayudarle un par de días.
Dependiendo del tipo enfermedad, la intervención se efectúa casi siempre con anestesia epidural (y sedación si lo desea), en menos de 1 hora de cirugía.
Son normales el cansancio y la incomodidad algunos días tras la intervención, por lo que deberá guardarse reposo relativo uno o dos días, sin someter a tensión las suturas.
Podrá hacer una vida normalizada sin excesivas tensiones al cabo de una semana o 10 días.
La mayor parte de sus molestias serán tratadas con medicación. Las zonas operadas tardarán algo más en recuperar su aspecto normal.
La vuelta al trabajo dependerá del nivel de actividad que requiera el mismo (entre 2 y 6 semanas).
Es conveniente seguir los consejos sobre cuándo comenzar a realizar ejercicio y actividad normal.
La cirugía proctológica es un grupo de procedimientos seguros, pero como en cualquier operación, hay riesgos asociados con la cirugía y complicaciones específicas asociadas con el procedimiento.
Como con cualquier cirugía, el dolor, el sangrado y la infección son las complicaciones mas importantes aunque en general son fácilmente controlables.
Las personas sometidas a estos tratamientos mejoran las molestias que presentaban antes de operarse, como el dolor, el prurito o picor y el sangrado.
Preguntas frecuentes

¿Son técnicas seguras?
En general son técnicas seguras.

¿Es doloroso el posoperatorio?
Con la medicación pautada, la incomodidad será mínima.

¿Pueden volver a aparecer?
Este tipo de lesiones puede volver a aparecer, aunque es poco frecuente. Un adecuado régimen de revisiones podrá detectar y resolver precozmente esta situación.